El cuerpo humano tiene muchos receptores diferentes. Los receptores son estructuras químicas basadas en proteínas que están unidas a sus células y que reciben señales de diferentes estímulos. El CBD interactúa con los receptores CB1 y CB2. Estos receptores se encuentran principalmente en el sistema nervioso central y en el sistema nervioso periférico respectivamente. El CBD afecta a los receptores CB1 en el cerebro y puede alterar las señales de la serotonina.
La serotonina es un neurotransmisor importante que controla nuestro comportamiento, nuestro funcionamiento de los órganos y nuestro estado de ánimo. La serotonina también es una de las encargadas de producir náuseas y disminuir el deseo sexual y está asociada al bienestar, por lo que cuando tenemos la serotonina baja, es cuando aparecen en nuestra cabeza pensamientos negativos, tristeza, ansiedad, irritabilidad, baja autoestima, problemas de sueño... y por tanto nos diagnostican estrés, ansiedad e incluso cuadros depresivos